Real Cofradía de Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén

La Real Cofradía de Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén, conocida cariñosamente como La Borriquita, es una de las cofradías más representativas de la Semana Santa de Zamora.

Fundada oficialmente el 15 de octubre de 1948, esta hermandad tiene una misión especial, pues su procesión de Domingo de Ramos marca el inicio de la Semana Santa zamorana. Este desfile, caracterizado por su colorido y alegría, está dedicado a los niños y las familias, quienes acompañan a Jesús en su entrada triunfal a Jerusalén.

La cofradía destaca por su carácter familiar y alegre, ya que, a diferencia de otras procesiones más solemnes, su ambiente festivo simboliza la bienvenida que Jerusalén brindó a Jesús como rey de paz. La Borriquita es, por tanto, un acto de apertura lleno de simbolismo, que invita a la comunidad a unirse en un ambiente de celebración.

Real Cofradía de Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén de Zamora

Fundación e Historia

Aunque la Real Cofradía de Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén fue oficialmente constituida el 15 de octubre de 1948, sus raíces históricas se remontan a siglos atrás. Los orígenes de esta procesión pueden situarse en la segunda mitad del siglo XIII, cuando el obispo y el cabildo catedralicio organizaban una procesión litúrgica la mañana del Domingo de Ramos en las inmediaciones del Castillo. En aquella época, el recorrido partía de la Iglesia de San Marcos, y los monaguillos cantaban el "Laus Deus" mientras representaban la entrada de Jesús en Jerusalén.

A lo largo de los siglos, esta procesión fue adoptada por la Venerable Orden Tercera de San Francisco, que mantuvo la tradición hasta principios del siglo XIX. Durante estos años, la cofradía desfilaba con un paso sencillo que representaba a Jesús montado en una burra, símbolo de humildad y paz. Este grupo escultórico fue el precursor del actual paso de La Borriquita, que se incorporó en 1950 tras el encargo realizado al escultor Florentino Trapero.

Con la oficialización de la cofradía en 1948, se consolidó un acto procesional dedicado a la entrada triunfal de Jesús, que simboliza el inicio de la Semana Santa en Zamora. Desde entonces, la Real Cofradía ha mantenido esta tradición, ofreciendo a la ciudad un evento cargado de historia, devoción y alegría cada Domingo de Ramos.

Hábito y Símbolos Distintivos de la Cofradía

La Real Cofradía de Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén se distingue por un hábito elegante y lleno de simbolismo. Cada detalle del vestuario de los cofrades refleja la majestuosidad y la paz con que Jesús fue recibido en Jerusalén:

• Túnica de raso blanco: Símbolo de pureza y paz, esta túnica es llevada por los cofrades adultos, realzando el carácter solemne de la procesión.
• Complementos en color púrpura: La botonadura, el caperuz, la faja y la capa púrpura representan la realeza de Jesús y refuerzan el carácter de respeto y devoción hacia su figura.

Los niños, que tienen un papel central en esta procesión, visten como hebreos para evocar la época de Jesús:

• Varones: Túnica blanca con turbante y faja púrpura.
• Niñas: Faja y toca azul celeste, en un delicado toque de color que aporta alegría y distinción.

Además, cientos de niños y familias se unen a la procesión portando palmas y ramas de olivo previamente bendecidas, simbolizando la acogida y el reconocimiento de Jesús como Rey de paz. Este detalle añade un componente especial de celebración y comunidad, reflejando el entusiasmo y la diversidad de quienes acompañaron a Jesús en su entrada triunfal.

La Procesión de La Borriquita

Cada Domingo de Ramos, la procesión de La Borriquita marca el comienzo de la Semana Santa en Zamora, un momento de alegría y celebración que congrega a familias enteras y da protagonismo especial a los niños.

Este desfile, caracterizado por la alegría de los niños que portan palmas y ramas de olivo, simboliza la entrada de Jesús en Jerusalén como Rey de paz. Niños y adultos acompañan el paso de La Borriquita, un grupo escultórico que representa a Jesús montado en una burra, rodeado de figuras que lo aclaman. El ambiente festivo y familiar de esta procesión contrasta con la solemnidad de otras celebraciones de la Semana Santa zamorana, convirtiéndola en una oportunidad única para que los más jóvenes experimenten el espíritu de estas tradiciones.

Para conocer todos los detalles del recorrido, consulta el itinerario completo de la procesión de La Borriquita en Zamora aquí

El Grupo Escultórico: Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén

El Grupo Escultórico de La Borriquita

El grupo escultórico de La Borriquita, una obra maestra del escultor segoviano Florentino Trapero, fue creado en 1950 y se ha convertido en uno de los símbolos más queridos de la Semana Santa de Zamora. La imagen central representa a Jesús montado sobre una burra, con una expresión de serenidad y humildad que transmite un mensaje de paz y esperanza. La sencillez de la burra y la postura de Jesús recuerdan el carácter humilde de su entrada a Jerusalén, evocando el momento en que fue recibido como Rey de paz.

Además de la figura de Jesús, el grupo escultórico incluye otras figuras que representan a la multitud que lo aclama. Entre ellas se encuentran hombres, mujeres y niños que sostienen ramas y palmas, simbolizando la bienvenida al Salvador. Entre las figuras destaca una mujer que lleva a un niño en brazos, un detalle que simboliza la importancia de la familia y la unión en este acto de fe. Esta representación ha sido cuidadosamente elaborada para expresar la emoción y la devoción de aquellos que recibieron a Jesús.

Detalles Destacados del Grupo Escultórico:

• Diseño sobre ruedas: Este paso se encuentra montado sobre una plataforma con ruedas, lo que permite un desplazamiento ágil por las estrechas calles del casco antiguo de Zamora y facilita la participación de los más jóvenes en el desfile.
• Elementos ornamentales: La figura de la mujer que sostiene al niño está decorada con pendientes de plata dorada, reflejando el esmero en los detalles y la calidad de la obra de Trapero.
• Simbología familiar: La composición general del paso destaca la importancia de la unidad familiar en la procesión, un aspecto que la hace especialmente significativa para las familias zamoranas.

La imagen de La Borriquita es uno de los pocos pasos de la Semana Santa zamorana que cuenta con ruedas, una característica que no solo facilita el movimiento del grupo escultórico, sino que también permite que todos los miembros, incluyendo a los niños, puedan seguir el paso y participar activamente. Este grupo escultórico, con su expresividad y belleza, es un claro ejemplo de la dedicación artística y espiritual que caracteriza la Semana Santa de Zamora.

Detalles y Curiosidades de La Borriquita

La procesión de La Borriquita no solo es uno de los actos más queridos de la Semana Santa de Zamora, sino que también está llena de detalles y tradiciones que enriquecen su simbolismo y atraen a visitantes de todas partes.

• El título de “Real”: La cofradía recibió el título de “Real” en reconocimiento a su profunda devoción y su papel fundamental en las tradiciones de la Semana Santa zamorana. Este honor resalta la relevancia y el compromiso de la cofradía con la comunidad, manteniendo viva la esencia de la entrada de Jesús en Jerusalén.
• Importancia de los niños en la procesión: La procesión de La Borriquita está especialmente dedicada a los niños, quienes participan vestidos de hebreos y portando palmas. Para muchos zamoranos, esta procesión es una de sus primeras experiencias en la Semana Santa, y se convierte en un recuerdo entrañable que perdura toda la vida. El entusiasmo de los niños y las familias convierte esta procesión en un acto de fe y celebración.
• Valor del grupo escultórico: La obra de Florentino Trapero es una de las piezas más valoradas y queridas de la Semana Santa en Zamora. Los detalles de las figuras y la expresividad de cada personaje transmiten la devoción y el fervor del momento de la entrada de Jesús en Jerusalén, haciendo de esta imagen una representación única en la ciudad.
• Diseño accesible: El paso de La Borriquita, montado sobre ruedas, facilita su desplazamiento por las calles del casco antiguo de Zamora. Esta característica poco común permite que los niños y otros miembros de la cofradía puedan acompañar a Jesús en la procesión de forma accesible y cómoda, promoviendo la participación familiar y comunitaria.
• Tradición de estrenar ropa: En Zamora, es costumbre que las familias asistan a la procesión de La Borriquita estrenando ropa nueva. Esta tradición popular, relacionada con el refrán “Quien no estrena en Domingo de Ramos no tiene ni pies ni manos,” simboliza renovación y esperanza, aportando un componente de alegría y celebración a la procesión.

La procesión de La Borriquita ofrece un espacio de encuentro y celebración que inaugura la Semana Santa zamorana con un mensaje de paz y bienvenida. Estos detalles y curiosidades le otorgan un carácter único y hacen de esta procesión un acto especialmente significativo para la comunidad.

Conclusión

La Real Cofradía de Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén, conocida como La Borriquita, es mucho más que una procesión en la Semana Santa de Zamora. Representa un acto de bienvenida, paz y alegría, que inaugura la semana de Pasión y congrega a familias enteras en un ambiente festivo y de devoción.

Con su historia centenaria, su grupo escultórico y sus tradiciones llenas de simbolismo, esta cofradía mantiene viva la esencia de la entrada de Jesús en Jerusalén, un evento que invita a la comunidad a unirse y celebrar la llegada del Salvador.

Cada Domingo de Ramos, La Borriquita transforma las calles de Zamora en un espacio de fe, celebración y renovación, donde adultos y niños, palmas en mano, recuerdan el mensaje de paz de Jesús.